La bulimia se
define como impulsos constantes de comer en grandes cantidades, a pesar de no tener hambre, la persona se
dedica a consumir cualquier tipo de comida, pero luego entra en una posición en
el que el remordimiento de haber comido tanto, la agudiza en el hecho que al probarse
una prenda esta no le quedara por haber aumentado de talla a cusa de la forma de
alimentarse, a todo esto la única solución que encuentra es provocarse el
vómito o consumir laxantes, para esta persona es su única y eficaz respuesta a
su problema de no tener el cuerpo que desea.
Galeno describió ya la "kynos orexia" o hambre canina como sinónimo de bulimia, considerándola como consecuencia de un estado de ánimo anormal, a finales de los años 70 fue descrita y traducida como el síndrome de purga y atracones o bulimarexia.
La bulimia se
considero como una enfermedad hasta el año 1979 por el psiquiatra inglés Gerald
Russsell, en la antigua Grecia ya esta dolencia era conocida pero sólo fue
identificada y descrita como una enfermedad con caracteres propios. Este término
proveniente del griego tiene como significado “hambre de buey”, este mal se
refleja comúnmente más en mujeres que hombres, entre las edades de 18 a 28 años,
según indica el Instituto Tecnológico de Sonora, añade que esto se convierte en
una dependencia física y emocional, porque la persona al tener “hambre”, que
sería como “gula”, éste se siente irritado, inestable e insatisfecho, también hay
personas que asocian el consumo excesivo de comida con problemas familiares,
sociales y físicos.
Estadísticas
de la Organización Mundial de la Salud indican que el índice de mortalidad por
bulimia y anorexia en el mundo es de 15 por ciento y que el 90 por ciento de
quienes sufren esas afecciones son mujeres.
Este cuadro sólo muestra indicadores en los que usted debe estar atento para prevenir esta enfermedad y que no pase a mayores consecuencias.
Conductas patologicas
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Signos
Fisiologicos
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Cambio de
actitudes
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Recomendaciones para tratar este trastorno Alimenticio:
- Psicoterapia individual, de familia
- Orientación Nutricional
- Estar bajo supervición de un terapeuta, el cual será el responsable de dar el tratamiento
- Disciplina en las dietas y con las hospitalizaciones si el persona lo requiere
- Hacer una vida social normal
- Regularidad en las consultas individuales y familiares
- Control médico
- Fortalecer la personalidad
- Confianza en el entorno familiar
- Confiar en el terapeuta
Consejos tomados de SALUD.COM
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